Laila Winter y las Arenas de Solarïe (Laila Winter I)

Título: Laila Winter y las Arenas de Solarïe.

Autora: Bárbara G. Rivero.

Editorial: Ediciones Toromítico, España, 2008.

 

Y va de…

Laila Winter es una chica con un gran problema: por imposible que parezca, tienen el cabello de color verde. Un horroroso y llamativo verde. Y sobra decir que lo detesta. Por culpa de eso, toda su vida ha sido objeto de las burlas y el rechazo de los demás, no tiene amigos y los años de colegio que se supone debieron ser geniales, no han sido más que una sucesión de eventos deprimentes. Además su padre, el único en quien podría encontrar apoyo, insiste en enviarla a Lomondcastle, donde su vida se ha transformado, si se puede, en mayormente infernal.

Pero las vacaciones de verano han llegado y con ellas, la vuelta a casa y su cumpleaños número 16. De regalo, su padre le entrega un misterioso libro con gemas incrustadas, que perteneció a su madre. Su emoción se apaga rápidamente cuando nota que todas las páginas están en blanco. Pero entonces, una noche cuando menos lo espera, el topacio comienza a brillar y letras en un idioma desconocido aparecen por la mitad del libro. De alguna manera, Laila logra leer una de las frases y entonces ocurre algo inesperado: va a dar de narices a un fantástico mundo brillante y colorido, con cinco soles.

Al principio no se lo puede creer. ¿Dónde está? ¿Cómo es que el libro la trajo allí? ¿Cómo demonios volverá a casa? –aunque no es que precisamente en ese momento estuviera deseando hacerlo-. La respuesta a la primera pregunta se presenta en la forma de tres chicas que la dejan con la boca abierta y no sólo porque viajen en un Mustang rosa chillón, sino porque resultan ser las mismas que vio fugazmente en el colegio días atrás. Una, que parece francamente hostil, es pálida y de cabellos negros, otra es rubia y la última –mira tú-, tiene el pelo violeta. Y ahí le dan las buenas noticias:

1. Está en nada menos que Ïalanthïlian, el mundo de la Bella Gente –o hadas, para acabar pronto, pero mejor ni pronunciar esa palabra, puesto que es un insulto-; concretamente, en Solarïe, uno de los cinco reinos en que se compone.

2. Evidentemente, aún con cabello verde y todo, Laila no es una de ellos; sino una nemhirie cualquiera –ya saben, humana-.

Pero las noticias acaban ahí, porque acto seguido la dejan plantada con la palabra en la boca, y se van tan tranquilas habiéndole robado su libro mágico. Y como Laila no es chica que se deje robar así como así, se decide a seguirlas para recuperarlo. A partir de entonces, sobre ella se ciernen varias verdades:

1. Acaba de conocer a sus tres mejores amigas.

2. Sí, las chicas son unas ladronas y de las buenas.

3. Acaba de comprar boleto seguro para una larga estancia en Faerie.

Y es que unirse al trío la llevará a sumergirse en aquel fascinante mundo y sus misterios; algo realmente muy difícil de resistir. Las chicas están intentando desvelar un enigma que se hunde en la historia olvidada de Faerie y que quizá cambie lo que hasta ahora creen saber. Y en el camino de semejante viaje, es posible que Laila descubra que existe una buena razón para su pelo verde, después de todo.

 

En mi opinión…

 

Me ha dejado encantada. En mi blog favorito –¿qué puedo decir?, una también tiene derecho a seguir otro blog que sea su favorito- lo recomendaban por la vivacidad de sus personajes y tener una excelente narrativa bien entretejida; así que, deseando probar las virtudes de esa tal “excelente narrativa”, decidí darle una oportunidad. Bien por mí, porque en efecto, vale cada uno de los $550 pesos que pagué por él.

Para empezar, está muy bien nutrido –con más de 500 páginas estándar, a letra pequeña y sin dobles espacios-, por lo que de entrada, una no se siente ultrajada, puesto que el pago va en proporción al material; y como además pesa bastante, también se pude ir una satisfecha por que al menos –y en el peor de los casos-, pagó por kilo. Incluso me atrevo a decir que, dejando de lado la más bien desafortunada imagen de la portada, la edición está linda: color aguamarina y con detalles de alas de hada –ejem, quiero decir, detalles de alas de Bella Gente- por ambos lados; lo que de nuevo hace a una pensar que la buena pasta que cuesta, se invirtió en poner en nuestras manos una presentación de calidad.

Luego, buscándole más detalles en el exterior, una se percata con agradable sorpresa, que la autora no es anglosajona; para variar, una novela con buena pinta de este lado del planeta de la lengua. Y entonces, por fin llega lo realmente jugoso: el contenido.

V a y a. Simplemente, muy bueno. La trama es compleja y rica en detalles, pero al mismo tiempo, se va sola, con un desenvolvimiento lo suficientemente intenso y absorbente para pasarlo realmente bien. Describe con gran dinamismo-detalle-majestuosidad el mundo fantástico de Faerie, que casi una puede verlo delante de las narices y con una maestría tal, que en modo alguno llega a hacerse pesado. Me ha gustado particularmente el despliegue de imaginación de la autora, al crear para nosotros un mundo tan variopinto. Ïalanthïlian se divide en cinco reinos: Solarïe, Aquarïe, Airïe, el Reino Blanco y Lunarïe; cada uno regido por una monarca poderosa y poblado por una clase diferente de Bella Gente. Una se queda con deseos de conocer más y más sobre estos reinos.

Los personajes, por su lado, realmente están pero que hablan solos: vivaces, divertidos, a cuatro dimensiones y con sello propio. Cyinder, Aurige y Nimphia son tan diferentes entre sí y tan particulares, que una rápidamente se encariña con ellas y las convierte a su vez en viejas amigas. Y los misterios… cielos, esos sí que son misterios. Página a página, la autora logró sembrar la intriga, y luego desvelarla poco a poco, haciendo aparecer más misterios que definitivamente absorben, creando una buena historia de aventuras fantásticas. Todas estas maravillas le valieron que me la comiera en menos de una semana y que ahora esté maquinando la manera de hacerme con las otras tres partes.

En suma, muy recomendable. Si desean una trama cargada de aventura, misterios, magia y un buen argumento cuidadosamente construido, no lo duden; esto es lo que buscan. Les encantará.

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